La desviación de la columna vertebral afecta hasta 4% de los jóvenes. Puede provocar las siguientes molestias: dolores de cabeza o cuello, una pierna más corta que la otra, dolores de espalda, dolores de pecho o abdomen, costillas más prominentes en un costado y dolores de piernas o rodillas. Algunas causas conocidas de la desviación de la columna vertebral son las siguientes:
Durante el parto, la presión ejercida sobre la primera cervical del recién nacido puede influir en su desarrollo.
Los niños que caminan a temprana edad deben ser especialmente controlados, ya que la presión ejercida sobre los discos en un cuerpo inmaduro en posición vertical puede ser causa de subluxaciones, así como durante los estirones de crecimiento mientras los huesos aún están desarrollándose.
Los microtraumas que se originan por caídas y fracturas pueden provocar que se adopte una postura inadecuada que, a la larga, desarrolla una desviación.
El uso incorrecto de las mochilas, junto con su peso desproporcionado, son factores que aumentan el riesgo. El desarrollo de la columna tiene su momento decisivo en las etapas infantil y juvenil, donde la corrección de la tendencia todavía es posible, ya que su morfología es aún maleable y responde muy bien a la terapia de manipulación espinal.
Es de vital importancia frenar el proceso eliminando las subluxaciones mediante ajustes vertebrales periódicos y cuidando la higiene postural. Varias investigaciones han demostrado que la quiropráctica tiene excelentes resultados en el control, la reducción y la corrección de la desviación lateral de la columna vertebral.